Si algunas vez has cambiado de peluquero sabes que encontrar a una persona que te corte el cabello de la forma que tu lo deseas es como una lotería y muy seguramente has salido más de una vez un poco decepcionado de la peluquería porque no te ha agradado el resultado en tu cabello.
Esto se debe simplemente a que algunas personas tienen las capacidades visoperceptivas más desarrolladas que otras lo que influye en la capacidad de juzgar la orientación, inclinación, posición o magnitud para aplicar una fuerza que se requiere para ejecutar una tarea manual – como la de cortar el cabello o afeitar la barba.
En ocasiones una trasquilada no es más sino el reflejo de una poco desarrollado percepción visoespacial. Nuestros ojos tienen la tarea de comunicarle al cerebro la magnitud de la fuerza, y la orientación en la cual la mano debe ejecutar una acción específica, como cuando el peluquero pasa sus tijeras por nuestro cabello.
Si su percepción falla, probablemente el resultado será un corte asimétrico y un cliente enfadado! Por esta razón, vale la pena pensar cómo se puede fortalecer esta habilidad perceptiva a través de pausas activas dinámicas y lúdicas.
¿ En qué consiste Torre de Babel?
Esta pausa activa dinámica se basa en uno de los juegos más populares en el mundo, Jenga. El objetivo es crear la torre más alta posible iniciando con una pila de 54 bloques de madera que vienen apilados de a 3 unidades por nivel.
El punto partida es una torre de 18 niveles, en donde cada nivel de bloques se encuentra posicionado de forma perpendicular al nivel inmediatamente superior e inferior.
Para el desarrollo de la actividad debes tener en cuenta unas reglas básicas para que que la pausa activa sea dinámica y entretenida:
- Cada participante debe remover de un bloque por turno del fondo de la torre.
- El bloque debe ser colocarlo en la cima de la misma.
- Solo se puede utilizar una mano al tiempo.
- Está permitido tocar los bloques para determinar el que esté más suelto, de fácil acceso o más fácil de remover.
- Los participantes no pueden remover ningún bloque de los dos primeros niveles completos de la parte superior de la torre.
- Se deben esperar 10 segundos para cerciorarse que la torre no se derrumbe, antes de dar paso al siguiente participante.
Esta actividad suele desarrollarse grupalmente en dos modalidades. En la primera, todas las personas participan en un modo de ‘todos contra todos’, es decir compiten de forma individual pero dentro de un grupo.
A lo largo de la actividad, la torre perderá la estabilidad y el participante que la derrumbe será el perdedor y quedará descalificado. Este ciclo se repetirá y el ganador de la serie es quien logre quedar invicto al final sin haber derribado la torre.
En la segunda modalidad, los participantes se dividen en dos equipos iguales los cuales deberán estar formados por mínimo 2 y máximo 4 personas. En este caso, el equipo vencedor será el que logre mantener la torre intacta sin derribarla en su turno.
¿ Cuáles son los beneficios?
Hay un número de beneficios físicos, cognitivos y psicológicos que se asocian a esta pausa activa dinámica, como el mejoramiento de la destreza manual, la coordinación oculomanual y la visopercepción.
Los tipos de movimientos que se requieren para la construcción de la torre son similares a los que se llevan a cabo en actividades u ocupaciones en las que se manipulan objetos pequeños o tareas como abotonar y desabotonar prendas o ensamblar pequeñas piezas de un equipo.
Remover o colocar los bloques de madera en los espacios o brechas de la torre demanda una muy buena coordinación entre los ojos y las manos, lo que la hace una una actividad ideal para refinar la motricidad de nuestras manos.
Jenga ayuda a mejorar la percepción visual y fortalecer la retroalimentación motora, al obligar a los participantes a medir la fuerza con la tocan los bloques y la ubicación en la que colocan los dedos.
Independientemente del tipo de ocupación, cualquier persona de todas las edades puede participar en esta pausa activa, sin embargo es más aconsejable e idónea para aquellos individuos cuya ocupación depende de una buena destreza y coordinación manual.
Por ejemplo, si trabajas en la industria de la salud esta pausa activa puede caerle como anillo al dedo a los profesionales que se desempeñan como cirujanos, odontólogos o inclusive anestesiólogos.
Foto por H Shaw en Unsplash Foto por Spencer Davis en Unsplash
Si te desenvuelves en otras industrias como la agricultura, la orfebrería, sastrería o mantenimiento de equipos, esta actividad puede servir como un medio de entrenamiento y refinación de la destreza manual.
Por otro lado, si trabajas como montacarguista en una bodega es muy probable que esta pausa activa te ayude a desarrollar tus habilidades visoperceptivas, lo que te permitirá organizar o acomodar de forma más eficiente la estantería.
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