El preinfarto, también conocido como angina inestable o preangina, es el dolor torácico que se produce antes de un infarto. Los síntomas de un preinfarto se desencadenan por una obstrucción de las arterias coronarias, los vasos sanguíneos que suministran sangre rica en oxígeno al músculo cardíaco.
Esta obstrucción reduce la cantidad de sangre rica en oxígeno que llega al músculo cardíaco, lo que provoca dolor en el pecho. El preinfarto puede ser una señal de advertencia de que se avecina un ataque cardíaco completo, por lo que es importante buscar asesoramiento y tratamiento médico si se experimentan los síntomas.
En la mayoría de los casos, un preinfarto no es necesariamente mortal en sí mismo, sino que es una señal de que podría ocurrir algo más grave en el futuro si no se trata.
Ten en cuenta que los síntomas de un preinfarto son similares a los de un infarto. Pero como son afecciones diferentes, los síntomas pueden ser engañosos y muchas personas no reconocen los signos hasta que es demasiado tarde. Por eso, hemos listado los principales sintomas de un preinfarto para que puedas identificarlos a tiempo.
Molestias en el pecho
El síntoma más común de un ataque al corazón es el malestar en el pecho. Puedes sentir dolor o presión en el pecho, o en uno o ambos brazos, el cuello, la mandíbula o la parte superior de la espalda.
Incluso puedes sentirlo en el abdomen; algunas personas lo describen como una indigestión que no desaparece. El malestar suele durar más de unos minutos, pero puede aparecer y desaparecer (intermitente).
Dolor en la espalda
Tambien puedes sentir dolor en el centro de la espalda, entre los omóplatos. Este dolor suele ser peor que el que se siente por una simple distensión muscular.
Dificultad para respirar
La falta de aire es habitual durante un infarto, así como durante la fase previa al mismo. A veces se describe como una sensación de falta de aire, pero es diferente de la falta de aire causada por el asma, el enfisema u otra enfermedad pulmonar.
Náusea repentina
Cuando tu cuerpo detecta un peligro, desvía inmediatamente el flujo sanguíneo a tus órganos vitales, incluidos el cerebro y el tracto digestivo. Sin embargo, si el peligro persiste durante mucho tiempo, el flujo sanguíneo a estos órganos puede cortarse por completo. Cuando esto ocurre, puedes experimentar náuseas y vómitos.
Cansancio o fatiga
Muchas personas que sufren ataques cardíacos se sienten cansadas antes de experimentar cualquier otro síntoma, incluso después de haber dormido lo suficiente. Si ignoras estos síntomas y continúas con tus actividades normales, podrías sufrir un ataque al corazón y no darte cuenta hasta que sea demasiado tarde.
Hormigueo o entumecimiento
El hormigueo o adormecimiento de los brazos o las manos es otro síntoma de un preinfarto. Esta sensación suele producirse en un brazo a la vez y puede extenderse a ambos.
El hormigueo en el brazo izquierdo suele estar causado por problemas nerviosos o circulatorios más que por un problema cardíaco. Sin embargo, si el hormigueo es constante, podría significar que hay algún problema en las arterias.
En algunos casos raros, también puede producirse en una pierna a la vez. El entumecimiento que se produce en ambos brazos o piernas puede ser un signo de infarto.
¿Cómo eliminar los síntomas de un preinfarto?
Para evitar la aparición de los síntomas de un preinfarto debes centrarte en reducir los factores de riesgo que lo provocan. Debes intentar reducir tus niveles de colesterol con una dieta balanceada y ejercicio constante.
Por otro lado, evita el consumo excesivo de alcohol, fumar y los niveles altos de ansiedad o estres. El estrés es una parte integral de la vida, pero un exceso de estrés puede ser peligroso. El estrés y los ataques al corazón están estrechamente relacionados. Al mismo tiempo, no siempre es posible evitar el estrés en la vida, por lo que es importante aprender a controlar sus niveles de estrés.
Leave a Comment